El trabajo de la relajación es esencial en el Aikido. La práctica correcta no puede basarse en ningún caso en la fuerza física, y sí en la armonía del movimiento de todo el cuerpo, la respiración, la conexión con el atacante (Ki Musubi) y el «escuchar», es decir, el detectar en qué puntos existe resistencia y en qué manera es posible reconducir esa resistencia hacia nuestra esfera de movimiento.
En estas dos tomas, realizadas por el compañero Mariano, podemos observar un ejemplo del concepto de relajación trabajado por nuestro Maestro, Marcos Peña Sensei. No se aprecia tensión ni conflicto, choque o imposición: la técnica surje de la relajación, de una postura corporal correcta, de una conexión con Uke.
Probablemente uno de los grandes referentes de la relajación en el Aikido fuera el desaparecido maestro Yamaguchi Shihan, 8º dan Aikikai y desarrollador de una de las mas bellas prácticas del Aikido. En esta fotografía podemos ver lo que el maestro Marcos Peña Sensei califica como «la relajación en estado puro».
